Apple finalmente permite que Netflix, Hulu y otras aplicaciones se vinculen a sus propios sitios web

El año pasado, Apple acordó hacer un pequeño cambio en sus reglas para las llamadas aplicaciones de «lector» (aquellas que proporcionan revistas digitales, periódicos, libros, audio, música o video como su función principal). Hoy, justo cuando marzo está por cerrar, Apple se cuela por debajo del alambre haciendo oficial el cambio.
El cambio a esta regla, realizado para abordar una queja y cerrar una investigación por parte de la Comisión de Comercio Justo de Japón, permite a los desarrolladores de dichas aplicaciones proporcionar un enlace único dentro de sus aplicaciones para llevar a los usuarios a un sitio web que el desarrollador controla para administrar su cuenta (incluida la información de facturación). Después de que soliciten un derecho de cuenta de enlace externo especial, es decir.
Apple ha permitido desde hace mucho tiempo que tales aplicaciones lleven la facturación fuera de Applepropio sistema de compra in-app, para el que la empresa toma 15-30 por ciento. Pero estas aplicaciones (Netflix, Kindle, Amazon Prime Video, Audible, etc.) no pueden facturar a los usuarios dentro de la aplicación. Ni siquiera se les permite enviar usuarios a la web para crear sus cuentas e ingresar información de facturación. Lo máximo que podÃan hacer, hasta ahora, es incluir texto sin formato que diga, en efecto, «ir a la web para crear su cuenta».
Si bien el cambio se anunció el año pasado, Apple dijo en ese momento que no entrarÃa en vigencia hasta «principios de 2022». La actualización de la guÃa de revisión de la App Store 3.1.3(a) ahora establece: «Los desarrolladores de aplicaciones de lectura pueden solicitar el derecho de cuenta de enlace externo para proporcionar un enlace informativo en su aplicación a un sitio web que el desarrollador posee o del que es responsable para crear o administrar una cuenta».
Si esto suena como lo mÃnimo posible Apple podrÃa hacer bajo la presión regulatoria, lo es. Pero sigue siendo un paso en la dirección correcta para los creadores de estas aplicaciones y reduce ligeramente la experiencia hostil del usuario que se vieron obligados a proporcionar según las reglas anteriores.