La mayor demanda de productos más saludables, cuyo proceso de producción sea ambientalmente responsable, es un hecho ineludible. Si esto también te preocupa, descubre cómo identificar productos libres de tóxicos
Comprar productos libres de ingredientes tóxicos, sin pruebas en animales y capaces de cumplir con una agenda ESG (acrónimo traducido al portugués como Ambiental, Social y Gobernanza), es una demanda creciente por parte de consumidores de diferentes perfiles. Esto es aún más cierto en el sector de la belleza y la cosmética.
En el Mercosur y la Unión Europea, el crecimiento del movimiento Clean Beauty es prueba de ello. Mientras que el primer bloque económico prohibió 1.376 ingredientes en las fórmulas cosméticas, el segundo prohibió 1.300.
Aunque están interesados en consumir productos libres de ingredientes tóxicos, muchas personas aún no saben cómo identificarlos. Por eso hemos preparado una guía para ayudarte a leer las etiquetas, comprender las certificaciones y ayudarte a elegir los productos de belleza adecuados. Entonces simplemente busca tu cupón en Simple Organic ¡Y compra los mejores cosméticos!
Cómo leer etiquetas
La industria de la belleza se ha transformado con el tiempo e incorporado innovaciones científicas y tecnológicas. La cadena de producción de este sector tuvo un alto costo para el medio ambiente y provocó, en muchos consumidores, reacciones adversas e intoxicaciones por componentes tóxicos con un efecto acumulativo y peligroso para la salud.
En la última década ha crecido el movimiento en busca de cosméticos limpios y libres de este tipo de contaminantes. El primer paso para consumir estos productos es saber leer las etiquetas e identificar ingredientes posiblemente tóxicos.
Se recomienda buscar productos con componentes de origen natural, ya que pueden tener numerosas combinaciones entre ellos y dar como resultado productos que tengan efectos armoniosos en tu organismo. Por otro lado, los ingredientes sintéticos pueden acumularse fácilmente en el cuerpo, ya que el cuerpo no los reconoce ni los absorbe de forma natural, lo que puede causar daños.
Por lo tanto, se recomienda buscar el sello IBD (para Ingredientes Naturales) o el sello Ecocert (organismo de inspección y certificación al servicio del ser humano y del medio ambiente en Brasil). Este organismo define que los cosméticos limpios deben tener al menos el 95% de su contenido total elaborado a partir de materias primas naturales, mientras que los demás 5El % puede estar compuesto por sustancias sintéticas enumeradas por el certificador, pero no prohibidas para este tipo de cosmético.
Algunas materias primas prohibidas en la cosmética limpia son el amoníaco, la silicona, los conservantes, las fragancias y colorantes sintéticos, el propileno y derivados del petróleo, el formaldehído, la hidroquinona, los parabenos, los ftalatos, los perfluoruros, entre otros ejemplos. Los cosméticos limpios tampoco pueden probarse en animales ni producirse mediante el sufrimiento de los animales.
Conoce las certificaciones
Para ayudar a los consumidores a identificar los cosméticos limpios, existen certificaciones internacionales que demuestran que estos productos son verdaderamente confiables. Uno de ellos es el sello PETA, válido a nivel internacional y garantiza que los procesos de producción no incluyen pruebas con animales en ninguna etapa y no utilizan ningún ingrediente de origen animal.
Otras certificaciones importantes en este ámbito son: Campaign For Safe Cosmetics (que garantiza el no uso de químicos asociados al cáncer y otras enfermedades graves), USDA Organic (al menos el 95% de los componentes son orgánicos) e ISO 22716 (garantiza que el la empresa sigue pautas de fabricación, control, almacenamiento y distribución durante todo el proceso productivo).
IBD es una certificación 100% brasileña con reconocimiento internacional, capaz de certificar que las materias primas y productos cumplen con estándares internacionales, garantizando no sólo la calidad y el respeto por la salud y el medio ambiente, sino también las buenas condiciones de trabajo.
Con la expansión de este mercado y los avances tecnológicos, hoy en día existen muchos más cosméticos limpios y una mayor variedad de fórmulas. Todos los consumidores tienen derecho a saber qué consumen. Por eso, es fundamental aprender a leer las etiquetas, reconocer qué ingredientes son tóxicos e irresponsables con el medio ambiente, identificar las certificaciones que garantizan la seguridad de un cosmético y compartirlo con amigos y conocidos.