Un grupo de organizaciones antimonopolio ha escrito una carta en la que insta a los legisladores a seguir adelante con los proyectos de ley dirigidos a los gigantes tecnológicos y refutando las afirmaciones de que esos proyectos de ley debilitarían la seguridad nacional.
La carta estaba dirigida a los líderes de la Cámara de Representantes de EE. UU., Que presentó un amplio conjunto de proyectos de ley destinados a frenar el poder de los gigantes de Silicon Valley a principios de 2021. Los gigantes tecnológicos se oponen a la legislación, pero también lo hacen algunos ex funcionarios de seguridad nacional que afirman que podrían amenazar la asociación de Silicon Valley con el Pentágono.
Según, la carta refuta esas afirmaciones. Más que eso, argumenta que depender de un puñado de empresas es más peligroso. La carta fue firmada por el Proyecto de Libertades Económicas Estadounidenses, el Centro para la Democracia Digital, Exigir Progreso, Ciudadano Público y el Proyecto Puerta Giratoria.
«Las grandes tecnologías no están aquí para ayudar a la seguridad nacional o el interés público, sino para mantener las rentas de monopolio y el poder de mercado», se lee en la carta. «Está codificado en su estructura corporativa y en la ley. El trabajo del gobierno es proteger nuestra seguridad nacional, no la de Mark Zuckerberg».
Lucas Kunce, oficial de seguridad nacional, oficial de la Infantería de Marina de los EE. UU. Y candidato a la oficina de EE. UU., Dice que la concentración del mercado en realidad perjudica las opciones del Departamento de Defensa. Kunce afirma que disminuye la cantidad de servicios y productos disponibles para la seguridad nacional.
Sin embargo, la gran mayoría de las compras de hardware comercial listas para usar (COTS) para el gobierno federal se ensamblan en China. Hay proveedores que no se pueden comprar a través de adquisiciones del Departamento de Defensa, pero hay muchos más proveedores que se pueden comprar que no.
Los nuevos argumentos surgen en respuesta a las afirmaciones de que la legislación antimonopolio debilitaría el dominio estadounidense. En septiembre, por ejemplo, un grupo comercial de la industria de la tecnología publicó un documento en el que afirmaba que las leyes antimonopolio podrían dar una ventaja injusta a los competidores extranjeros y obstaculizar la innovación estadounidense.
Los proyectos de ley antimonopolio han sido presentados por el Comité Judicial de la Cámara, pero aún no se han votado en la sala. Los problemas se atribuyen a los problemas fiscales actuales que enfrenta la legislatura y a la falta de un camino claro hacia adelante en los esfuerzos.