Finalmente, Japón logró lanzar su sonda lunar, que ya se encuentra en camino a su destino en el satélite natural de la Tierra.
Después de tres retrasos en su lanzamiento debido a condiciones climáticas desfavorables, JAXA pudo lanzar con éxito el módulo de aterrizaje inteligente para investigar la Luna (SLIM).
Sonda lunar de 100 millones de dólares llegará a la Luna en febrero de 2024
Después de verse obligada a posponer el lanzamiento tres veces seguidas, la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) finalmente logró enviar con éxito la sonda SLIM a la Luna.
Se espera que esta sonda, que supone una inversión de 100 millones de dólares (aproximadamente 93 millones de euros), llegue a la superficie lunar en febrero de 2024, tras realizar un largo viaje, propulsada por un bajo consumo de combustible.
En rueda de prensa, Hiroshi Yamakawa, presidente de JAXA, afirmó que el “gran objetivo de SLIM es demostrar un aterrizaje de alta precisión para poder aterrizar donde queramos en la superficie de la Luna en lugar de aterrizar donde podamos”.
Los últimos contactos con la sonda japonesa hacen pensar que ésta continúa su viaje, según lo previsto y sin incidentes que reportar.
De lograrlo, Japón será la quinta potencia espacial en llegar a la Luna. Se espera que SLIM aterrice cerca de Mare Nectaris, un mar lunar que visto desde la Tierra aparece como una mancha negra y que su principal tarea es probar sistemas ópticos avanzados. y tecnología de procesamiento de imágenes.
El satélite XRISM siguió en el mismo barco con SLIM
La sonda japonesa también analizará la composición de las rocas encontradas en este lugar para buscar más pistas sobre el origen de la Luna.
Pero la sonda SLIM no estuvo sola en este lanzamiento. JAXA utilizó la nave espacial para enviar también al espacio el satélite X-Ray Imaging and Spectroscope Mission (XRISM), un proyecto que desarrolló junto con la Agencia Espacial Europea y la NASA.
La función de este satélite será observar los vientos de plasma del Universo para que los investigadores puedan descubrir más sobre la evolución de las estrellas y galaxias.
Mientras tanto, el satélite XRISM ya ha enviado señales a la Tierra, lo que confirma que los paneles solares del equipo se desplegaron con éxito.